El dolor de espalda desapareció

Carmen Edith Medina es una reconocida odontóloga que por más de 35 años ejerció su profesión en diferentes instituciones de salud de El Salvador. Sin embargo, esta profesión que demanda estar por mucho tiempo en una postura incómoda, hizo que se le diagnosticara lumbalgia, un dolor en la parte baja de la columna que la obligó a buscar ayuda profesional.

Pese a haberse sometido por varios años a diferentes tratamientos de relajación, pesas, ejercicios de fisioterapia y otras, su dolor solo disminuía, sin embargo, poco tiempo después volvía.

Pese a haberse sometido por varios años a diferentes tratamientos de relajación, pesas, ejercicios de fisioterapia y otras, su dolor solo disminuía, sin embargo, poco tiempo después volvía.

En las mañanas, cuando tenía que levantarse, su dolor era tan intenso que la obligaba a esperar un par de horas en la cama para poder entrar en calor para que los dolores se disminuyeran y así poder iniciar sus labores cotidianas, aunque siempre con la molestia.

La enfermedad la obligó a usar bastón, pues en varias ocasiones tuvo golpes al caerse, en parte por los mismos dolores que la columna le provocaba.

Sin embargo, la vida de Carmen Medina cambió en el 2016, cuando un amigo le recomendó iniciar el tratamiento de descompresión espinal, método que permite que las vértebras del cuerpo se separen intermitentemente, haciendo que los discos ocupen su lugar original y que los nervios ya no sigan comprimidos.

“En las primeras sesiones me dolía, pero con el paso del tiempo el dolor disminuyó. Ahora ya tengo un año de que el dolor se fue, ya no siento nada gracias a Dios y a los avances de la tecnología que permiten que uno pueda recuperarse de estos dolores”, dice la odontóloga.

Aunque siempre tiene que usar bastón, después de seis sesiones las dificultades para levantarse durante las mañanas desaparecieron y ha vuelto a recuperar algunas funciones motoras que había perdido.

El método de descompresión espinal está autorizado por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) de los Estados Unidos, con lo que los pacientes pueden estar seguros de su eficiencia en tratar los problemas de columna, sin necesidad de acudir a la cirugía.